«Inside Me», arranca en Fundación MAPFRE Canarias con las obras Tim White y Jeremy Blake
Las composiciones sinestésicas, sonoras y, en ocasiones, hipnóticas de los artistas norteamericanos podrán disfrutarse desde el 30 de marzo hasta el 13 de abril
La Fundación MAPFRE Canarias ha presentado esta mañana, en su sala de exposiciones de Juan de Quesada, la muestra Inside Me, que abre sus puertas a partir de hoy, 30 de marzo, a las 19:00 horas. Una exposición que ha sido posible gracias a la colaboración de Galería Leyendecker, que se prolongará durante los próximos cuatro meses, y que representa un completo trabajo de investigación sobre las tendencias, técnicas y temáticas que se han utilizado en los últimos treinta años en el mundo del videoarte.
La exposición ha contado con la colaboración de Paco Barragán, comisario y teórico de arte, que ofreció una visita a los medios asistentes.
En palabras de Barragán Inside Me ofrece un completo «repaso a la historia del videoarte de los últimos 30 años» y está compuesta por once artistas que abordan «todas las temáticas que son importantes para la sociedad de hoy, como la identidad, el género, o la sexualidad, a través del video», que define como «una herramienta muy interesante que todo el mundo entiende en la sociedad actual y que supone también un lenguaje en el que confluyen el resto de las herramientas artísticas, desde la fotografía, la pintura, o la instalación».
De izquierda a derecha: Angel Luis de la Cruz y Lele H. Colomer, directores de Galería Leyendecker; Andrea Marrero, coordinadora de cultura de Fundación MAPFRE Canarias y Paco Barragán, colaborador y teórico de arte.
La exposición arranca con las obras Moving paintings y Berkshire fangs, de los norteamericanos Tim White-Sobieski y Jeremy Blake, respectivamente, conocidas por ser sinestésicas, sonoras e, incluso, hipnóticas, que forman el primero de los ocho bloques que componen esta muestra y que se irán alternando cada dos semanas.
Tim White Sobieski – «Moving Paintings»
Nació en Varsovia en 1961. Vive y trabaja en Nueva York. A través de sus fotografías, vídeos, esculturas e instalaciones multimedia. Crea imágenes de una gran carga emocional, que suscitan una respuesta en el espectador. Por una parte, se apropia de la iconografía de la historia del arte y la estética publicitaria para elaborar imágenes precisas, contundentes, que podrían asociarse a las que difunden los medios de comunicación a diario, en las que practica una alteración del color que las hace casi irreales. También explora los recursos de la fotografía y los medios digitales para llevar una imagen cotidiana casi hasta la abstracción, operando asimismo una serie de alteraciones que cuestionan su validez como registro de la realidad.
El trabajo videográfico de Tim White es una persistente exploración sobre las dualidades existenciales entre la vida y la muerte y sobre los estrechos límites que separan el mundo material y el espiritual, aspectos estos, que le han obsesionado en los últimos años. Su trabajo es esencialmente polisémico, en él cada imagen nos propone un enigmático juego de significados en el cual el flujo del sueño y la memoria es una de las señas de identidad más recurrentes y donde también apreciamos una nueva mitología en la que los juegos con el lenguaje se transforman en alegorías que funcionan como dispositivos de reflexión que nos ayudan a descodificar los complejos mecanismos de la mente humana. En sus últimos años ha ido configurando un universo iconográfico y formal en el que se desliza un enigmático discurso sobre el deseo, la luz, las tinieblas, lo sagrado, lo profano, la soledad, el silencio, la falta de comunicación, el hombre, la naturaleza, y los estados de transición y regeneración.
Su lenguaje, en ocasiones poético, impone estrategias cercanas al ensimismamiento que actúa sobre nuestro subconsciente, proporcionando al espectador emociones que nacen de la experiencia de la contemplación, por ello es muy importante el papel jugado por la luz, el sonido y el espacio donde su ubican sus instalaciones.
Jeremy Blake – «Berkshire Fangs»
Jeremy Blake (1971 – 2007) fue un artista de reconocida trayectoria y promesa. Sus logros artísticos y su carrera aumentaron rápidamente. Fue considerado influyente e iconoclasta. Blake atrajo la atención por primera vez a fines de la década de 1990 con sus impresiones C digitales semiabstractas a gran escala que aparentaban ser pinturas y fotografías, pero no lo eran. Luego comenzó a animar secuencias de tales imágenes para crear obras de video digital en bucle continuo que emulaban pinturas y películas, pero no lo eran. Sus imágenes visualmente densas a menudo incorporaron expresiones tanto abstractas como figurativas a través del lenguaje del Modernismo y las voces del Cine Negro. Las obras estéticamente estilizadas de Blake abordaron una variedad de temas, desde la violencia y el terrorismo hasta el glamur y la decadencia, desde metáforas de espacios arquitectónicos hasta perfiles de personificaciones culturales.
Las obras de Blake se han exhibido internacionalmente. Se incluyeron en tres Bienales de Whitney, están representados en catorce colecciones de museos y son un tema de disertaciones y libros de texto. Es ampliamente aclamado como pionero en fusionar las tradiciones de la pintura con un nuevo mundo digital. Creó híbridos de obras de nuevos medios, nuevos géneros y un nuevo tipo de experiencia artística. Hizo «pinturas» que eran impresiones digitales y películas que eran «pinturas en movimiento». Fue un innovador que abrió las puertas a cómo otros se expresarán en el futuro. Su obra se encuentra en las colecciones del Museo de Arte Moderno y el Museo de Arte Moderno de San Francisco.
En Inside Me, el espectador se enfrentará a una multitud de lenguajes y propuestas que certifican la complejidad y la versatilidad del vídeo, en tanto que herramienta artística, a la hora de analizar, cuestionar y deconstruir las grandes y pequeñas narrativas de la sociedad en el siglo XXI y, en particular, la posición del sujeto contemporáneo en ella, tal y como ha explicado su curador, Paco Barragán, quien también la define como “una magnífica metáfora para la sociedad de hoy”.
La muestra hace un recorrido por ocho bloques en los que se podrán encontrar desde la icónica obra Madame Bovary (1995) de la norteamericana Ellen Cantor, hasta la reciente Cuando suben las mareas (2022) del chileno Enrique Ramírez, y que han quedado divididos del siguiente modo: Tim White y Jeremy Blake, del 30 de marzo al 13 de abril; Ellen Cantor, del 14 de abril al 27 de abril; Julian Rosefeldt, del 28 de abril al 11 de mayo; Oliver Herring, del 12 de mayo al 25 de mayo; Gianfranco Foschino, del 26 de mayo al 8 de junio; Olaf Breuning y Miwa Yanagi, del 9 de junio al 22 de junio; Enrique Ramírez y Lilly Lulay, del 23 de junio al 6 de julio, y Federica Dauri, del 7 de julio al 21 de julio.
Puedes acceder al programa completo de esta exposición en nuestra página web
